La empresa de infraestructuras Dura Vermeer ha desarollado un tren de reciclaje de asfalto in situ. El asfalto antiguo se calienta con calentadores inflarrojos y se retira cuidadosamente para mantener las propiedades en buen estado. Después, los materiales nuevos se añaden, y la mezcla nueva se extiende y adhiere a la carretera. Es posible utilizar el 100% de los materiales ya existentes. Las emisiones de c02 son menores, ya que no es necesario el transporte hacia y desde una instalación de asfalto.